La búsqueda

Los últimos meses no han sido nada favorables en lo que a conseguir un trabajo se refiere, digo, no soy muy consistente en mi búsqueda además de que algunos eventos se han interpuesto en mi camino y eso ha mermado un poco el asunto. Aunque debo decir que no soy precisamente la viva imagen de la actividad humana.
Los reveses más significativos que he tenido en mi etapa de inútil a la sociedad son los siguientes:
CEUX: La prestigiada universidad planeaba abrir un departamento de desarrollo para satisfacer todas sus necesidades tecnológicas, más específicamente hablando, aplicaciones web.
Entre los requisitos estaban conocer un par de ambientes en los que en estricta teoría yo me muevo como pez en el agua, esto era un plus porque normalmente aquellos que desarrollan aplicaciones web no son precisamente diestros en otras tecnologías, yo me sentía como un entusiasta león detrás de un antílope con solo 3 patas sobre la sabana africana, el jale estaba en mi bolsillo.
Compré ropa de burócrata ante mi confianza de conseguirlo, zapatos de viejito y corte mis rastas. Nunca me volvieron a hablar y fue el primer fracaso en mi búsqueda.
Bajamar: Para nadie es un secreto que conseguir trabajo está bien pinchi difícil, más aún en plena cuesta de enero-recesión económica- crisis global-whatever, el campo de las tecnologías de la información no está exento a estos fenómenos, entonces me vi en la necesidad de olvidar 5 años de mi vida e ignorar el hecho de ser un profesionista. Leí en un periódico que Bajamar, un resort que está a unos cuantos kilómetros de la ciudad estaba solicitando personal, guardias de seguridad para entrar en detalles, y me tragué el poco orgullo que tenía dejando un nudo en mi garganta para solicitar el trabajo. No soy un experto en las entrevistas de trabajo, pero mi sentido de lógica tenía las respuestas que ellos querían escuchar, al menos eso creía.
Cuando llegué al lugar me imaginaba en la caseta de seguridad de la entrada, pidiendo identificación a cualquier persona que se atreviera a pensar siquiera en que podría pasar mi punto. Después me imaginé en el campo de golf jugando con algún ex militar norteamericano sin un brazo.
En la entrevista fui cuestionado por una mujer de gran belleza que hizo que mis manos sudaran y que mi lógica valiera chingada, descubrió que yo no quería pasar el resto de mi vida sentado en una caseta vigilando el tráfico entrante, que no le tendría amor a la camiseta pues, y me mando a Shanghái Sumatra.
Mi punto y el ex militar norteamericano podían irse a la mierda.

CICESE: Esto sería como un trabajo freelance, por alguna razón, la institución forjadora de personas diestras en el campo solicitaba los servicios de alguien para desarrollar un sistema en un tiempo definido, recomendado por más de una persona llegue con el entrevistador y después de una serie de preguntas ambos llegamos a una conclusión, no era el indicado para el puesto, olvidé muchos de los conceptos, hice el ridículo y manche a las personas que me recomendaron.

Un fiasco decepciónate.

Ese día apesté a derrota, bien cabrón.

espero algún día laborar en CICESE, pero como investigador.

Softek: La transnacional mexicana más importante en lo que a tecnologías de la información se refiere, y a cuya empresa alguna vez dije que jamás me enfilaría por tratarse de una maquila elegante, solicitaba un desarrollador, un par de días después estaba en una mesa en mi primera entrevista semi bilingüe, no niego que fui presa fácil de los nervios, sentía que la iba a cagar, aunque la persona con la que yo iba tenía un inglés más pateado que el mío. Aun así, sentí que mi precaución en la entrevista sería igual a la mostrada por un elefante en una tienda de cristalería fina.  
La entrevista terminó más rápido de lo que creí, pero creo que me defendí bien, sin embargo me hizo ver que mi inglés necesita una pulidita, y el hecho de que no se hayan acercado a mi hasta la fecha me hace pensar que efectivamente, no fui el feliz ganador del puesto.

Probablemente haya habido más intentos, todos terminaron donde mismo. 

A veces me doy lástima, pero eso no sirve para ni pito.


What i feel by Someone who sings in a pfizer spot.


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